Jessie (Leigh Cook) es una reportera de una televisión local que con la ayuda de su jefa Jane (Sciorra) y un cámara Rob (Pardue) intentan demostrar que el asesinato de 2 mujeres fue cometido por un psicopata homicida que les manda los videos en los cuales las seguia y las grababa por la calle antes de asesinarlas. El esfuerzo por demostrarlo da paso al terror cuando comprueban que en la próxima cinta que les manda el asesino las mujeres grabadas son Jessie y Jane. Jessie acobardada dejará el trabajo y se mudará de ciudad dejando a Jane y Rob con la investigación a la cual se unirá un patético presentador de televisión (Elwes) en horas bajas.
Crítica
Puntuación del crítico: 5
El argumento es interesante, aunque la peli no lo es tanto ya que podría haber dado más de sí, sobretodo con un reparto tan notable. Aún así se deja ver bastante bien, sobretodo la última media hora más por el ambiente de los decorados y la fotografía que no por el guión que es previsible. Del reparto sobra Leigh Cook que debería dejar la interpretación y dedicarse al cultivo de la remolacha catalana, el resto están convicentes aunque la verdadera sorpresa, más bien sorpresón, lo da Cary Elwes que está impresionante en su caracterización del patético presentador de televisión, además de que está totalmente ireconocible ya que hasta que no vi los créditos finales no me dí cuenta de que era él, chapó porque está realmente fantástico y sólo por verle merece la pena la peli.
Judías con tomate
Ficha de Película enviada por Logan D. el 21 de Abril de 2004